VERSO EN EL MAR




Si algún día al ir bogando
con mi barca por el mar,
Dios me llama a su destino
para que deje de amar,
quiero morir navegando
y dejar de navegar
donde las olas acunen
las espumas de cristal.


Bajo arrecifes de plata
que me lleven a enterrar,
en una cueva de algas
para dormir y soñar.


Dos gaviotas, que sean cirios,
el ataúd, de coral,
el sudario una gran ola
y la carroza de sal.


Que me lleven dos delfines
rumbo hacia la eternidad,
y que canten una música
las caracolas del mar.


Que me alumbren por la noche
dos estrellas de la mar,
y que me de su frescura
una brisa de azahar.


Las campanas de la aurora
tocan con celeridad,
porque un alma de poeta
sueña cerca de un coral.


Un poema silencioso
navega, por alta mar,
en una barca sin remos
sin destino hacia un final.


La noche, tiene crespones,
las nubes lloran en paz,
y en el fondo de una cueva
un verso vive en el mar.

UN GORRIÓN MUY PEQUEÑITO





Un gorrión muy pequeñito
cantaba por mis ventanas,
venía muy despacito
a alegrarme la mañana.

Se acercaba con la aurora,
se marchaba con el alba,
al día siguiente volvía
a alegrar mis esperanzas.

Me levantaba enseguida
con su voz tan delicada,
a veces cuando soñaba,
al mirar le acariciaba.

Yo, le dejaba comida
en lo alto de mi almohada,
dando saltitos entraba
cuando era madrugada.

Una noche que había luna,
una luna delicada,
apareció el gorrioncillo
con un ala ensangrentada.

¿Qué te ocurre, pajarillo?,
ahora es tiempo de dormir,
me he perdido con la niebla,
no tengo donde acudir.

Le cogí entre mis manos,
y le di mucho calor,
con lágrimas en los ojos
el animal se durmió.

Allí se quedó conmigo,
fuimos amigos los dos,
al cabo de poco tiempo,
el animal se marchó.

Le esperaba muchos días
a la caída del sol,
ya nunca más volvería,
es que se hizo mayor.

Seguro que habrá encontrado
a su pareja de amor,
y habrán tenido retoños,
se habrán casado los dos…

SE VA LA VIDA



(Dedicado a mi hermana Tita, mujer legal y responsable)
La vida se va,
con un rumbo marcado
hacia un destino incierto,
espejismo encadenado
con obsesión de vuelo
para la conquista de un eterno sueño,
peregrino que llega desnudo
a su término postrero.

Se va la vida
después de un largo viaje
por un largo camino,
trazando un surco
donde se ha sembrado
la niebla del presente y del pasado,
las cosechas de sueños,
las espigas
del recuerdo y del olvido.

La vida se va
después del último sol,
para amanecer
junto al alba,
allí,
donde el preludio de un beso
se ha hecho sombra
en una noche sin término,
en un dormir profundo,
en la última estación
sin lluvia y sin viento…

REGALAME UNA NOCHE



Regálame una noche, tan solo una necesito, para así volver a recordar a qué saben tus labios, tan solo una ansío, para entender el brillo en tus ojos, al menos una para volver a recordar la dulzura de tu esencia, para conocer tus secretos.”

Regálame una noche, y con ella regálame tus sueños, porque solo así descubriré si estoy presente en tus pensamientos, necesito saber si soy parte de ti, al menos mientras duermes”.

Déjame conocerte a la luz de la luna, porque así es mas clara tu hermosura, déjame estar contigo en la oscuridad, mientras la luz de las estrellas me guían hacia ti.”

Déjame ser parte de tu espacio, de tu tiempo, quiero saber que es lo que te hace sonreír, lo que te hace llorar, quiero conocer todo lo que te hace ser así, tan llena de vida, tan llena de amor.”

Regálame una noche, tan solo una te pido, solo así estaré presente cuando despiertes, solo así veré tus ojos antes que lo haga el día, solo así podré besar tus labios antes que los roce el aire, solo así, aunque sea por un instante, podré tocarte antes que lo haga la mañana.”

Regálame un instante de tu vida, un suspiro de tu alma, una caricia de tu ser, tan solo eso necesito para seguir llevándote por siempre dentro de mi, tan solo eso añoro para saber que siempre estarás ahí.”

Acompáñame una noche, y con ella te soñaré todos mis días,
pensaré en ti todas mis noches, te abrazaré todas mis mañanas, te encontraré en todos mis recuerdos.”

Permíteme acariciarte en un recuerdo, tocarte en un pensamiento, besarte en un suspiro, quisiera recordarte en un sueño, escucharte en una sonrisa, verte en una lágrima, quisiera tenerte en un instante de amor.”

Desearía encontrarte en una estrella, amarte en un deseo, me encantaría embriagarme de tu amor, inspirarme con la belleza de tu rostro, caminar a tu lado en una vida.”

Entrégame una mirada, tan solo así entenderé la honestidad de tus ojos, regálame una palabra, tan solo así escucharé la verdad de tus sentimientos, comparte conmigo unas horas, tan solo así conoceré la otra historia de tu vida, regálame una parte de ti, regálame... una noche.”

Por eso, si me regalas una noche contigo, te digo:

GRACIAS

QUISIERA SER ARROYO



Quisiera ser arroyo
que atravesar quisiera
tu cálido aposento
y allí amaneciera.

Y reflejar tu cara,
tu cara y ligereza ,
en esas aguas claras
de llantos y tristezas.

Quisiera ser arroyo
para ver tu escultura,
y dejarte tu alma
sin ninguna amargura.

Y acariciar tu encanto
en la arena desierta
cuando sale la luna
allá en la descubierta.

Quisiera ser tu arrollo
que arrulla tu silencio
cuando te quedas sola
soñando con el viento.

Y cantarte un canto
de amor eterno,
cuando vas en tu barca
con tanto miedo.

Quisiera ser arroyo
y cogerte las hojas,
y con todas ellas
hacerte esta estrofa:

Ya no corre el arroyo
de aquellos tiempos,
se ha quedado sin agua,
se ha vuelto seco…

POR LA NOCHE IRE A ENCONTRARTE



Por la noche iré a encontrarte
surcando tu cielo en sueños,
y me posaré en las nubes
y te abrazarán mis versos.
Dejaré que en esas nubes
dibujes mi cuerpo a besos,
que este sea tu mejor cuadro,
que yo sea tu secreto.

Esta noche, despacito y en silencio,
quiero ser el que te hable,
en susurros y muy quedo,
y en tu oído decirte
todo lo que yo te siento.

Esta noche entre sueños
fusionaremos los cuerpos,
y en simbiosis perpetua seremos
uno solo...allá en los sueños.

Esta noche y en secreto,
junto a un valle de luceros,
te diré lo que te quiero
junto al calor de los besos.

PÍNTAME




(Dedicado a Claudia Buruaga, pintora sensible)

Si eres pintora de paisajes
y pintas melancolías,

o tal vez las ilusiones
que sacuden en la vida.

Te pido hoy que me pintes
y plasmes así lo que siento,

que va más allá de mi rostro
que traspasa el perfil de mi cuerpo.

Desnúdame sin que me desvista,
soy modelo de los sueños,
que han dejado atrás la vida
que han dado forma al lamento.

Y si llegas a descubrir los tonos
que me llenan de ilusiones,
esos que emana sus rayos…
Pinta entonces mis pasiones…

Entrégame después la pintura
que voy a ponerle un marco,
y en cada noche de luna
volverè a sentir que te amo…

PALABRAS




No... yo no soy Poeta....
simplemente mi alma desgrana palabras
que mi boca callan....
esas palabras que nacen de adentro
y... en cada latir de mi corazón
libre las dejo....

Palabras de amor, de nostalgias...
acompañadas con la magia de la noche
y con el perfume
con las que ellas me embriagan...

Palabras que me guían, por una ensenada
de dulces y tranquilas aguas
donde se mece mi barca....
donde la luna la acaricia con sus rayos de plata...

Y no... no soy Poeta, pero siento en mi piel las letras
esas que calladas...con amor en la boca besan...
esas que a fuego grabadas en mi alma son perpetuas
y... el latir de mi corazón siempre será por ellas....

En mi silencio soy libre, como libre nacen mis letras...
en ellas va mi latir y el amor

yo no soy Poeta....
simplemente mi alma desgrana palabras
que mi boca callan....
esas palabras que nacen de adentro
y... en cada latir de mi corazón
libre las dejo....

Palabras de amor, de nostalgias...
acompañadas con la magia de la noche
y con el perfume
con las que ellas me embriagan...

Palabras que me guían, por una ensenada
de dulces y tranquilas aguas
donde se mece mi barca....
donde la luna la acaricia con sus rayos de plata...

Y no... no soy Poeta, pero siento en mi piel las letras
esas que calladas...con amor en la boca besan...
esas que a fuego grabadas en mi alma son perpetuas
y... el latir de mi corazón siempre será por ellas....

En mi silencio soy libre, como libre nacen mis letras...
en ellas va mi latir y el amor

NANA A LA PANADERA



Panadera, dame pan,
dame tu pan panadera,
con las migas de tu pan
es más fácil mi condena.

En la cárcel de mi amor,
vas a ser mi prisionera
para estar junto a mi alma
hasta el día que me quieras.

Quiero hacer una cadena
con tu pan, mi panadera,
para estar encadenado
en la lumbre de tu hoguera.

No tires tu pan tan tierno
en sea chica vereda,
es mejor que te lo guardes
al ladito de tu vera.

Coge el trigo de la siega
Y muélelo en tu molino,
Y amásalo con las lágrimas
De este pobre campesino.

Panadera cuece el pan
temprano en la mañanita,
que vendré pronto a buscarte
como cuando eras chiquita.

Tu pan es como el amor,
tierno y dulce en la mañana,
y al hacerse algo mayor
se come con más desgana.

Panadera, dame pan,
dame el pan que yo más quiero,
pues si no de tanta hambre,
en el sendero me muero…

MISTERIOS




Crecieron rosas
en un invierno,
misterio de la tierra
que no comprenderemos.


Cayeron lágrimas
de dos luceros,
formaron el rocío
de los senderos.


Cuajó la nieve
en el azul del cielo,
se helaron las estrellas,
un desconsuelo.


Canción de cuna
rompió el silencio,
cariño de una madre,
ternura en verso.


Flor en el alma,
amor y fuego,
con las alas del aire
se hicieron vuelo.


Río sin agua,
aire sin viento,
son como un peregrino
que muere lejos…


Sierra sin cumbre,
niño sin juego,
son como dos amores
sin un te quiero.


Sonrisa oculta,
llanto y silencio,
dolor de un alma
que amó en secreto.


Nieve en las sienes,
caminar incierto,
esperar el viaje
para lo eterno.

MI NOCHE EN SILENCIO



Se perdieron las estrellas
en mi lecho de nostalgia

y se hizo larga la noche
y se nubló toda mi alma,

mi rostro sobre la almohada
entregaba húmedas lágrimas

y no podían mis ojos
dormirse de tanta añoranza.

Al compás de mi reloj ,
mi corazón escuchaba...

las horas que se iban yendo,
sembrando en los sueños distancia

y a medida que corrían,
más muerto mi espíritu estaba,

alejándose de aquel día
en que encontré tu mirada.

Pasó de pronto una nube,
de frío color pizarra,

y en sordo ruido me dijo...
se ha ido ya quien esperabas,

comprendí entonces que en vano
mi triste voz te llamaba

y que en esa noche sin luna
habían robado mi esperanza.

MEDITACION



La campana del tiempo
suena,
recordando la quimera del pasado,
y me voy perdiendo
con mis sentimientos
del ayer y del mañana.

La vida,
es como una rama
que va dejando huella
cuando el árbol se resquebraja,
sacudiendo su perfume
de las múltiples esencias guardadas,
Sembré,
en los surcos de la niñez,
y he cosechado
los secretos ocultos de la vida,
que recorrí
por los senderos interiores
llenos de rastrojos
bajo la serena luz de la luna.

He visto,
manos de lucha,
corazones cansados,
miradas en penumbra,
que son como un viento lejano
que silba
junto al silencio humano.

Una luz iluminó el camino,
una estrella iluminó el abismo,
y en el largo peregrinar de mi viaje,
observé que aquella luz era yo mismo...

LUCES DEL ALMA



Te encontré otra vez, hallé en tu alma tanto,
que enraicé en tus surcos sembrados de tu encanto,
ahora ya no lloran las luces de mi alma,
mi vida ha renacido, mi amor está en la calma.

Amo, sufro, rio, lloro, hablé con Dios,
quise amar lo inalcanzable, era imposible,
grité mi soledad, caminé por los ríos,
bebí en tu manantial de aguas imposibles.

Te canté desde mi latido con aliento,
eras novia del sol desde el silencio,
una lágrima brotó por ambos ojos,
la puse yo en tus labios, en esos labios rojos.

Ni los tardíos rayos de sol de aquel invierno,
ni las grandes tormentas de aquella primavera,
hacen que tu amor a mí me corresponda,
el viento frío me azota en esa gran pradera.

La luz te ilumina en la puesta de sol,
¡cómo mi corazón te ama, despierta!,
quieres ser libre, dejar a tu amor,
eres un espejismo de mis noches muertas.

Quiero deslizar, huir, navegar,
por mares de olvidos, y luego al final,
te buscaré a ti con tal de amar,
y miraré al cielo y me pondré a rezar.

Ya perdí la fuerza para correr hacia ti,
si te busco no te encuentro, no quieres vivir,
te voy a dejar tranquila, tendrá que ser así,
de ahora en adelante, voy a vivir sin vivir.

Y…contemplaré la aurora en una fría mañana,
y sembraré tu encanto de nuevo en aquel surco,
para esperar el fruto, el fruto de tu alma,
y…renacerá mi vida y volverá la esperanza.

LA NOCHE



Ha vuelto de nuevo,
sin fallar,
a verme la noche.

Silencio, soledad,
calma, luciérnagas,
solo oscuridad.

Sosiego en el alma,
mis ojos escrutan
en la lontananza
la mar estrellada.

Me llama,
la noche me llama,
desde mi aposento
la dejo que entre,
sola, solitaria.

Ha vuelto de nuevo,
y con mi voz de plata,
me hace preguntas
que yo la respondo
con mi voz callada.

Noche, noche oscura,
vuelve mañana,
y adorna mi lecho
con alas brillantes
de libélulas blancas.

LA CANARIA Y LOS JILGUEROS




Una canaria crió
ocho jilguerillos blancos
que parecían ratones,
de delgados, eran flacos.

Cuidaba de que comieran
su racioncita a diario,
y también de que bebieran
allí cerca de aquel lago.

Es que eran delicados,
pues además les traía
larvas, crías y gusanos
de los bichos que cogía.

Cuatro campos les sembraba
con alpistes y con granos
para llenar la despensa,
los inviernos eran largos.

Un día se hicieron grandes
los jilguerillos tan blancos,
¡qué figuras tan esbeltas!,
de colores, eran guapos.

Alegraban con sus trinos
a los valles y a los prados,
las mariposas danzaban
con el cantar de los pájaros.

Aprendieron a volar
y se marcharon temprano
a buscar otros amores
por los montes muy lejanos.

Al cabo de mucho tiempo
regresaron muy ufanos,
se fueron ocho jilgueros,
y vinieron treinta y tantos…

LA AMAPOLA Y EL CLAVEL



Una amapola sufría
por el amor de un clavel,
para que ella no sufriera,
un día yo la corté.

Al cabo de cierto tiempo,
pasé por aquel lugar,
el clavel se iba muriendo
de dolor y soledad.

Qué solo se quedó él,
ya no encontró nada igual,
al llegar la primavera
allí floreció un rosal.

El aroma era distinto,
el color, inusual,
su porte majestuoso
no lo igualaba el rosal.

Además tenía espinas
en sus hojas el rosal,
qué suavidad la amapola,
parecía brisa del mar.

Los insectos la libaban,
y sus alas al volar,
le daban un aire fresco
al calor de su trigal.

En los días de tormenta,
cuando el agua la bañaba,
parecía una barcarola
salida de un cuento de hadas.

Y sus danzas con el aire,
se movía con tal garbo,
que no había nadie que lo iguale
ni las rosas ni los nardos.

No se pudo enamorar
de la rosa ese clavel,
las lágrimas de su llanto,
se las llevó el río aquel…



HE VENIDO HOY HASTA TI



He venido hoy hasta ti,
con las arrugas del tiempo,
para beber en tus labios
aquellos besos tan tiernos.

Recordar aquellas tardes,
cuando mojabas tu pelo
en aquellos manantiales
de azul claro como el cielo.

Y para ir a la ermita,
por aquel camino nuevo
lleno de fresas y lirios,
de amapolas y cantuesos.

Anduvimos por caminos
de morales y de almendros,
ahora tu pelo y el mío
con más nieve que en los cerros.

Nos cogimos de la mano,
¡qué nos importaba el tiempo!
los luceros nos miraban
de reojo por el cielo.

¿Te acuerdas de las alondras,
de los jilgueros de invierno?
¿ Y de aquellos ruiseñores
cuando nos dimos un beso?

Casi todo sigue igual,
las siembras y los barbechos,
los amores…quién lo sabe…
nosotros somos ya viejos.

Pero a pesar de la edad,
ves que vine junto a ti,
bebí otra vez el amor
en tus labios carmesí.

DIME MADRE ¿DÓNDE ESTÁS?


Dime madre ¿dónde estás?,
te fuiste sola hasta el cielo,
y yo me quedé detrás
llorando solo en silencio.

Cada día miro al cielo
por ver si puedo abrazarte,
o quizá solo encontrarte,
tal vez verte sin mirarte.

¿Y sabes lo que me pasa?,
que se me llenan mis ojos
con un brillo muy brillante,
con lágrimas implacables.

Nunca pude conocerte,
nunca en tu regazo, madre,
como se duermen los niños
cuando sueñan con los ángeles.

No conocí ni tus besos
ni caricias maternales,
ni te vi nunca los ojos
ni el cariño de la sangre.

De noche cuando me acuesto,
yo siempre te llamo, madre,
y me desvelo en silencio,
y lloro en mis soledades.

Yo quisiera darte un beso,
un beso tan entrañable,
como tú me hubieras dado
si hubieras vivido antes.

Todas las noche le luna,
me sonríe al acostarme,
y es entonces cuando creo
que me estás besando, madre…

CONFESION



Yo me acuso, Padre,
de que en las calles oscuras
donde viven los ricos,
un ejército de niños
duermen al aire,
con la desnudez oculta,
tan solo llevan la sonrisa triste
para cobijarse.

Y mientras,
donde no hay arrabales,
una legión de perros
duermen en buena cama
y comen exquisitos manjares.

Dos mundos paralelos,
respiran el mismo aire,
pero,
la barca de la vida
para muchos,
avanza cortando los mares
como un puñal que rompe
el claro azul de los corales.

He visto,
el llanto de un pescador,
los ojos silenciosos
de un niño negro,
la tumba de dos soldados
sin nombres y sin medallas,
un gemido anónimo,
el vuelo de una paloma blanca.

La barca sigue su curso
con sus redes echadas,
recogiendo ¡quien sabe qué!

Yo, me sigo acusando Padre…

A TI



( A Teresa Lun)

Me gustaría pregonar tu nombre

por aquellos mundos nunca pisados,

por si acaso algún día puedo perderte

que nada ni nadie puedan borrrarlo.


Y pintar tu mirada por las paredes,

y tu sonrisa tan dulce por los pinares,

tus pisadas tan suaves por los frutales

y tu figura tan linda en los encinares.


Me gustaría oír tu voz en el firmamento,

esa voz cálida que me da aliento,

y me dijeras muy cerca junto al oído

tú eres mi amor, mi cariño, yo no te olvido.


Yo quisiera adivinar toda tu ternura,

tu sensibilidad y toda tu dulzura,

tu tolerancia y tus amarguras

y tu gran suavidad junto a tu cordura.


Y verte caminar descalza en el infinito,

y tu cuerpo gracioso por los senderos,

y cogiendo tú un pez junto a ese río,

tan lejos, tan sombrío y un poco frío.


Y verte allí jugar con los pajaritos,

y dar calor y aliento a los pequeñitos,

y verte acariciar a los animales

cuando tú les das su comida como raudales.


Y…cuando tú te asomaras por aquél puente,

con tu pelo muy largo resplandeciente,

por donde corren las aguas muy cristalinas

donde calman su sed muchas golondrinas…


Te miraría a tus ojos muy fijamente

y cogería tu mano tan suavemente

que te diría: abrázame, ven, tiernamente,

y…dame, dame un beso muy suavemente.


Y entonces cogería para ti un ramo de flores,

muy grande, muy alto, con mil colores

para que cuando tú lo miraras, me recordaras

y para que tú al olerlo, a mí me amaras.


Y aunque tú no me amaras, ¿sabes que haría?,

para que tú me quisieras…yo rezaría,

y volvería a pregonar tu nombre en el infinito,

y soñaría con tus besos un día de frío…

AMANECERES



Amaneces tú con mi memoria.
Vienes a mí en cuanto despierto.
Abro mis ojos, estás.
Todo en mí tiene tu acento.

Me despierto a tu mañana
a tu labor, a tus vientos.
Me incorporo a tus relojes,
a tus actos y momentos.

Aunque no te vea, estás
y todo en mi se hace tu aliento.
Amanezco a tus mañanas
olvidado de mi ser,
y en ti, y por ti viviendo.

UN RAMO DE FLORES ROJAS




Un ramo de flores rojas
se lo llevó la corriente,
una bella mariposa
bebe agua en un torrente.

Un caballo se detuvo,
se detuvo de repente
al contemplar esas flores
donde manaba la fuente.


Y en esa fuente manaba
un agua tan transparente
donde allí se reflejaban
las flores rojas yacentes.

Ese agua iba regando
los surcos y las simientes
donde nacieron las flores
que se llevó la corriente.

Las flores rojas crecieron
donde estaban para sienpre.
En una tumba de nácar
tus silencios tan perennes.

La tarde se iba muriendo
y allí, por aquél poniente
en el lago de los cisnes
la brisa se hizo relente.

Los árboles ocultaron
ese sol tan transparente
donde brillaba la aurora
cuando vino lentamente.

El cielo se oscureció
con nubes muy exigentes,
los luceros relucían
con destellos impacientes.

Recogí el ramo de flores
como un recuerdo presente
y en aquél caballo blanco
galopé por el torrente.