Una canción de cuna
resuena en el alba,
donde un rayo de sol entra
por una ventana
para calentar a un niño
que ha nacido en la mañana.
Aquella música,
ha roto el silencio,
y al aire se escapa,
con una balaba,
los suspiros de un beso,
las cenizas de las llamas latiendo,
las caricias de una madre
que amamanta queriendo.
Una mirada clara
se va repitiendo
en cada mañana,
mientras...
el niño duerme el sueño
de la vida que empieza
al salir el sol
por una montaña en lontananza,
mientras los ecos rebotan
los acordes de una bella nana.
El amor se ha hecho ternura,
y en los jazmines
de ese alma tan delicada,
unas mariposas rojas nacerán,
para seguir su rumbo,
y poder llegar
a su meta futura,
a la montaña más clara,
a la más alta...
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